Todo carolinense ha ido a Isla Verde en muchas ocasiones. Incluso miles de turistas le visitan mensualmente. Ahora, ¿te has preguntado por qué ese nombre?
Aunque hoy llamamos "Isla Verde" a casi todo lo que vemos en la imagen de abajo, La Isla Verde, es el islote que aparece dentro del círculo. Con el paso del tiempo, tanto la playa donde se encuentra este "accidente geográfico" (nombre dado a ciertos lugares con características poco usuales), así como gran parte del área cercana, tomó el mismo nombre: ¡Isla Verde!
La Isla Verde queda al norte de la punta El Medio (conocida así por estar en el medio de la costa de Carolina), en la Urbanización Biascoechea, marcando la división entre las playas de Piñones e Isla Verde/Ocean Park.
José Benitez: "He escuchado que ese islote estaba conectado con una propiedad de la calle Amapola al final donde ubicaba el Hotel Empress, que antes era una casa privada, pero las corrientes marinas erosionaron el terreno, separando el islote de la costa. Inclusive, los dueños de la propiedad en la punta de la calle Amapola se vieron en la necesidad de construir sendos pilotes para evitar que el mar se llevara el terreno completo existente. Según me han contado, esta erosión ocurrió porque un propietario de otra casa en esa misma calle quiso construir un muelle para su lancha y dinamitó unos arrecifes para lograr el acceso de su lancha desde el mar adentro al muelle en el patio de su casa."
En esta zona podemos encontrar La Reserva Marina del Arrecife de La Isla Verde: alrededor de 869,000 metros cuadrados de área natural protegida, que desde el 2005 sirve como protección de la biodiversidad de dicha área. Esta reserva es hogar de una variedad de hermosos corales y tortugas marinas, como el Carey de Concha y el Tinglar; también es visitado frecuentemente por manatíes y otras especies en peligro de extinción. Y, sí: hay algas y peces...¡muchos peces! Nemo, Dory y muchos más, ¡jaja!
Roger Torres: Mucho que arponeé allí... Muchos platos que llevé a la mesa de mi familia, pargos, chapín, mero, cotorros, samas, calamares, picúas, langostas, pulpos... ¡Hay de todo y nunca se acaba!"
Quienes han visitado este islote, cuentan que desde él se puede ver toda la playa de Isla Verde, Pine Grove y El Balneario. Además, "esa bulliciosa y larga playa que va desde La Playita, hasta el Cementerio y que pasa por El Alambique" (tomado del libro "Musarañas de Domingo", de Edgardo Rodríguez Juliá).
Samuel Acosta escribe: "Se ve desde el Hotel Empress."
Aquí una foto más clara de La Isla Verde:
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